Desde hace unos 3000 años hasta el año 100 a.C, en la península de Santa Elena y en la parte baja de la cuenca del río Guayas se desarrolló una sociedad llamada la cultura Chorrera. Fue la más representativa en la elaboración de múltiples de objetos de cerámica.
Llegando a perfeccionarse en las técnicas del trabajo de arcilla, técnicas que son desconocidas hasta la actualidad, como es el caso de la “pintura iridiscente” de los cuencos, que al mojarse permite ver los diseños y los colores. Los grados de cocción y los desgrasantes utilizados fueron los más resistentes al paso del tiempo, como hoy los podemos apreciar. Por todos estos conocimientos se decía que, Chorrera es el “núcleo de la nacionalidad ecuatoriana”.